Mi paseo por la Ruta del Cares

Este fin de semana pasado, me marché a hacer una de las rutas más impresionantes de España.

Situada en los Picos de Europa, atravesando de León a Cantabria, esta ruta, que parte de Valdeón, tiene una longitud de unos impresionantes 12 km. Hasta Cabrales.

Mi recomendación de tienda online de collares para perros

Tener un perro en casa, es ser uno más en la familia. Eso, todos los que tenemos perro, lo sabemos.

collares para perros en www.thepetshopboys.es

Por ello, queremos cuidar hasta el más mínimo detalle de su confort y seguridad. Es lo menos que podemos hacer por unos peludines que tanto cariño, amor y dulzura nos regalan, que nos mejoran la vida y nos la hacen más llevadera, nos la especian con sus peripecias, nos la hacen disfrutar más viéndoles a ellos disfrutar, y por supuesto, nos dan de vez en cuando anécdotas que contar a familiares y amigos, ya sea, porque han destrozado su o nuestro cojín, o por que hacen cosas que no esperamos.

Por todo ello, se merecen lo mejor, y si lo que estás buscando, es un collar para perro, te sugiero que eches un vistazo al amplio catálogo de esta tienda online, es de toda confianza, cuidan cada pedido al detalle y por supuesto, tienen los mejores precios.

Tienen de todos los colores, tamaños, tipos y por supuesto, la mejor calidad. Hasta tienen collares led para los que no quieren perder a su perro dando un paseo por la noche.

Es por todo esto, que te recomiendo visitarla. Pero aún hay más, Para Thepetshopboys, los animales no son sólo su negocio, también son su pasión, porque son propietarios de perros también y todos aquellos clientes que compren algún producto, tienen la posibilidad de donar, a partir de 1€, y por cada € que tú dones, ellos regalaran un kilo de pienso a la protectora de animales que vosotros escojáis. Porque muchos perros son abandonados, o maltratados y en estos tiempos de crisis, más aún, y por desgracia, las protectoras no pueden dar abasto con sus propios medios. Una ayuda que, aun costándoles dinero (por que les cuesta dinero, con 1€ no compras un kilo de pienso para perros), siguen realizando por su compromiso con los animales, y su fe en un comercio responsable.

Así que yo no lo dudaba, y me decantaba por www.ThePetShopBoys.es para tus compras online para tus mascotas. A ti no te cuesta nada, a todos los perros que ayudas a alimentar, les haces un favor enorme.

Hasta el próximo post.

Sugerencia, Un viaje, por "La ruta del tambor y del bombo" parte 2

Este artículo empezó aquí.

Calaceite

Pero en la cocina está Dora, una mujer santa y hábil, que tan bien saber freír unos huevos con chorizo como preparar un arroz con tordos: ¡qué arroz, amigos míos! Alcañiz, el primer pueblo tamborilero, está a 35 km de Calaceite. Allí, bajo la protección de un castillo calatravo que albergó incluso“cortes generales” de la Corona española, se puede comer egregiamente en el hostal Meseguer o en el mismo parador de la Concordia, ubicado en el enhiesto castillo. Otros hostales-restaurantes con honradez profesional son Calpe y Sonante. En esos días todos nominativos no han de ser pocos: todo está a tope. Tras Alcañiz, la carretera se bifurca. Hacia la izquierda unos veinte kilómetros nos llevan hasta Calanda y otros tantos hasta Alcorisa. Si seguimos recto, pasamos por la Estañca un embalse natural. donde se crían anguilas que Meseguer guise estupendamente, y a unos 30 kilómetros está Híjar y la Puebla de Híjar, todos ellos centros con una Semana Santa muy sonada. C’alanda, patria de Buñuel, ilustre español, es el punto de reunión de los “entendidos” del tambor. 

Su hotel, Ealfagón, está siempre a tope y así su comedor, que también es honesto y sabroso. Híjar, con una Semana Santa declarada de interés turístico como las de Alcañiz y Calanda, también tiene un solo hostal, La Casa del Hijarrano, pero también, como todos estos pueblos, tiene cantidades de bares y tabernas donde se puede comer un siempre apetitoso plato de lomo frito con judías y costillas de cordero o huevos con chorizo. 

Desde el Jueves Santo por la mañana hasta el Domingo de Pascua estos establecimientos: los entrañables bares del pueblo, hacen horario continuado y no sólo atienden al público sino que despachan todo tipo de productos gastronómicos propios de la comarca. Desde el queso de Tronchón ese queso que tanto entusiasmó a Cervantes corno para citarlo en su “Quijote”. a las longanizas elaboradas con cerdo-cerdo y hierbas aromáticas, al jamón de Teruel, a las aceitunas negras del Bajo Aragón, al aceite de oliva virgen, al vino recio con tanto sabor como graduación, a las sabrosas y bien cocidas hogazas, a los dulces almendrados o a las almibaradas “empanadetes”. Claro está que ni el Maestrazgo ni Teruel ni el Bajo Aragón se agotan con esta breve resefla de pueblos. 

Hay más, escondidos entre esos montes harto difíciles que conoció, durante las guerras carlistas, el valor y el arrojo del llamado tigre del Maestrazgo, el general, cabrera, o el maquis en la Guerra Civil.

Volveremos porque Mirable, Cantavieja, Villarluengo, Iglesuela del io Moreila bien lo merecen. 

Sobrevuelo Una singular ruta turística por el Bajo Aragón y el Maestrazgo Calanda celebra con los . redobles del tambor y del bómbo la tradición religiosa de la Semana Santa 

Sugerencia, Un viaje, por "La ruta del tambor y del bombo" parte 1

Próximas ya lás fechas de la navidad. La sugerencia que os traigo es muy diferente. Este viaje lo hice en Semana Santa, de ahí sus referencias. Pero aún lo recuerdo como si fuera ayer...

Nos estamos refiriendo a la “Ruta del tambor y del bombo” que corre, a través del Bajo Aragón y del Maestrazgo turolense, por estos pueblos que conservan celosa- mente la tradición de evocar lapa-Sión y muerte de Cristo a través del repicar de tambores y bombos.La devoción y la pasión de las procesiones a. base de tambores y bombos, donde el vino para combatir el frío nocturno contrasta . con la piadosa justificación de la quermese, es la constante de Alcafliz, Calanda, Híjar y Alcorisa des- de el viernes al filo del mediodía, cuando los tambores, a modo de lúgubre pregón, “rompen la hora” para anunciar el comienzo de la Pasión, hasta el sábado por la noche cuando las campanas echadas a vuelo anuncian el advenimiento del día jubiloso de la Resurrección. Es el sainete que se torna sarao. Es lo sacro que se mezcla con lo profano sin estridencias y sin aspavientos. Los hombres salen, con el enorme tambor en ristre y la maza que requiere brazos vigorosos, y repican hasta ensordecer al vecindario no importa la hora. Todo está permitido, incluso el generoso trago de vino rancio acompañado por el bocadillo a base, eso sí, de cuaresmales anchoas o calamares a la romaria, mientras que el jamón aparece camuflado en suculentas tortillas. 

No se puede ni se debe interrumpir la procesión o la ronda de los mozos que salen a pregonar la Pasión con el sordo rimbombo del tambor al que hace de contrapunto el sonsonete de algún tamboril manejado no manos aún poco expertas en estas lides. Prioridad absoluta para el bombo y el tambor en esos días y en esos pueblos de horizontes nuevos. 

Unos horizontes que, en los días de Semana Santa, suelen ser cardenalicios y atormentados por presagios de tormentas y fríos vientos. pero que encandilan y convencen al turista en busca de emociones nuevas. Y bajo esos horizontes el caminante hallará también apropiada restauración para aliviar sus fatigas de vagueantes. 

Allí en el Maestrazgo, se come bien y basta. No existe una gastronomía o una cocina refinada: hay buenas materias primas, que es lo importante. Los pueblos del Maestrazgo ofrecen un paisaje de pinceladas fuertes y costumbres recias. La tierra dura, avara en frutos y cosechas, de escasa y tumultuosa agua, recuerda adjetivos viriles. Pero a la hora de hablar de cocina hay que contar con el saber y la delicada precisión de la mano femenina. La cocina es,en esos pueblos, fruto del amoroso quehacer de las mujeres. Son. ellas,enlutadas o dicharacheras, de pelo cano, refajos de grueso paño o enaguas almidonadas, las que sufren las tribulaciones de los fogones. Hablar “chapurreau” Para el viajero catalán, el Maestrazgo comiena después de Móra d’Ebré y Gandesa. En el puente sobre el río Algars está el límite entre las provincias de Tarragona y Teruel. 

Cinco kilómetros después está Calaceite, primer pueblo turolense y puerto del Maestrazgo donde todos hablan catalán, “cha purreau” lo llaman cariñosamente los catalano-aragoneses. Y en “chapurreau” Enrique Alcalá y sus dos hijos, Enrique y Miguel, recitan la carta de su fonda, una de las buenas de la comarca. Tanto que mereció ser incluida por Nés tor Luján y Joan Perucho en su Ii-bro “La cocina española” y es placa de bronce al mérito turístico.